Muchas personas viven en un bucle que se repite una y otra vez, después de una temporada sin hacerse muchas preguntas, de pronto una nueva anécdota les golpea con fuerza y se cuestionan de nuevo si el camino que están siguiendo es su camino y si llegarán a ser felices algún día.
¿Quién no se ha hecho esta pregunta alguna vez? Quién no se ha preguntado si llegará a encontrar la estabilidad en su vida, si algún día logrará un trabajo donde sea feliz, si habrá paz en su matrimonio o si llegará a estar tranquilo económicamente. ¿Quién no?
Aquí va la primera píldora de la felicidad: cuando tú quieras.
La felicidad es una cuestión que depende directamente, entre otras cosas, de un binomio universal, poderoso y muy sencillo de comprender: expectativas vs. realidad.
Es fácil, piénsalo. ¿Por qué un padre, que espera un 10 de su hijo, no se alegra cuando el hijo viene con un 8? Porque estaba esperando un 10. ¿Por qué un adulto no es feliz con su vida? Porque estaba esperando otra vida. ¿Porque una persona no es feliz en su relación de pareja? Porque suponía que la vida en pareja era otra cosa. ¿Por qué nos defraudan siempre los Reyes Magos? Porque esperamos permanentemente ese balón o esa muñeca que nunca trajeron.
Si no estuviéramos permanentemente abusando de nuestra mente y generando expectativas sobre todas las cosas habidas y por haber nos ahorraríamos el 90% de nuestras fuentes de infelicidad. Déjame preguntarte algo, ¿qué es más fácil, cambiar tus expectativas o cambiar la realidad?
Segunda píldora: gestiona y controla tus expectativas.
Pero Ale, ¿esto quiere decir que no puedo esperar nada de la vida? ¿No puedo tener objetivos, metas o sueños? No, no quiere decir eso. Tú puedes tener los objetivos de vida que tu quieras, trabajar por tus sueños y esperar de tu relación de pareja o tu nuevo trabajo lo que tú quieras, ahora bien ¿estás esperando lo que tú quieres esperar o estás esperando lo que tu cultura te ha dicho que debes esperar?
Imagina que es normal que los Reyes Magos traigan calcetines, ¿te frustraría tanto tener todos los años calcetines debajo del árbol? ¿Qué pasaría si todo el mundo tuviera calcetines en sus zapatos ese día? ¿Te sentirías infeliz?
A veces generamos expectativas basadas en lo que creemos que debe ser, lo que nos han enseñado que es normal o, peor, lo que vemos en otras personas. Como en Instagram todas las personas se ven felices y esbeltas, yo debería ser feliz y esbelta, ¡craso error!
Tercera píldora: no practiques la comparación.
Entonces tú querías el nuevo Peugeot 308, pero resulta que, cuando lo consigues, tu compañero de trabajo se compra un Jeep Grand Cherokee y lo que parecía ser felicidad y euforia se convierte en un «el proximo coche que me compre será un Jeep». ¡Pero si te acabas de comprar el 308! ¡Todavía huele a nuevo y ya quieres otro!
¿Me sigues?
Prometí una reflexión corta y lo voy a dejar así, pero quiero dejarte algunas otras preguntas:
- ¿Hay algo de lo que hayas comprado en los últimos años que te siga haciendo feliz hoy en día? Tan feliz como estabas en el instante antes de comprarlo, no cuando ya lo habías pagado (créeme que no es lo mismo).
- ¿Tienes alguna creencia tatuada a fuego en tu ser que sea social, cultural o de costumbre familiar? Voy más allá, ¿crees que alguno de tus «es que esto debería ser de esta forma» puede estar basado en algo aprendido de otra u otras personas?
- ¿Qué pasaría si en lugar de luchar contra la realidad, tú simplemente dieras respuesta a la misma?
- ¿Cómo te sentirías si experimentaras cada uno de tus días con la actitud de un niño que no sabe nada del dichoso deber ser?
- ¿Cómo reaccionarias si los Reyes Magos te trajeran un palo?
Me encanta!!!!! Es que te leo y es como si me psicoanalizases a mi misma realmente si nos plantearamos todo esto, simplificariamos mucho las cosas.
Gracias Eva, exactamente, ¡podemos replantear muchas cosas para darle otra interpretación a nuestra vida! Un abrazo!
Una maravilla de reflexión, me la guardo sin darle muchas vueltas para no desvirtuarla.
Me encanta !!! A veces estamos esperando otras cosas que no vemos lo que tenemos alrededor.
Muchas gracias Karem, eso pasa demasiado a menudo! Un saludo!
Que padre reflexión, sin duda es cierto todo lo que escribes, pero que duro es darse cuenta que tienes arraigados hasta el tuétano muchos miedos, muchos tabúes e incluso enseñanzas de tus ancestros. Comprometerse al cambio es el gran reto. No perderse en ese va y ven de preguntas; darse siempre la oportunidad de fallar pero también de recomenzar.
¡Esa es la clave! Estar dispuesto a recorrer el camino independientemente de los obstáculos que se puedan encontrar. Saludos!
Ale
Tu post, me parece muy acertado, solo que me genera mas preguntas que respuestas, eso es bueno, primeo hay que cuestionarse, como paso previo a los cambios.
Entonces, el quid de la cuestión es conocerse a si misma y saber que te hace feliz, no??
Si estamos tan marcadas por la cultura, la educación, la sociedad, etc, como se consigue saber qué quieres realmente, qué te hace feliz??
¡Hola Julia!
Tu pregunta es genial, una muy buena forma de poner en orden esa cuestión es fijando tus objetivos y depurando la lista. Es decir, debes analizar qué quieres en esta vida y ordenar esas metas por prioridad, en el análisis de tus objetivos puedes llegar a darte cuenta de que hay objetivos que no son tuyos, no los quieres en realidad o no los quieres en este momento.
Pregúntate qué cosas quieres lograr y luego pregúntate si quieres trabajar por ellas.
Saludos!
Ale
Gracias bonita! Siempre tan acertada!! Efectivamente es tan conveniente dejar de «esperar» tanto y disfrutar de todo aquello que nos llena de gozo asi, sin más, simplemente disfrutando!
Me encanta todo lo que escribes, siempre me pones a pensar… y sacas de mi esas cositas que no vemos o que tenemos olvidadas … GRACIAS!
¡Gracias a ti! Es todo un placer servirte de inspiración.
Ale